Para mi era impensable, levantarme pronto para salir a correr, con lo que me gusta apurar durmiendo hasta última hora.... pues con la venida de Sara me parece que va a ser la mejor hora. Aún no me he vuelto un adicto a las salidas mañaneras (que digo mañaneras, si a esas horas aún ni ha salido el sol, es casi noche cerrada), pero en la última semana llevo 3 y la verdad es que cuesta arrancar, pero luego se te queda un buen cuerpo de la leche. A las 8 llegas a casa, duchita, desayuno y al cole en bici.... y te da la sensación de haberte pegado el palizón del siglo, y con los deberes hechos... mola, pero sigue dando pereza. De momento voy a aprovechar que a las 6:45/50 más o menos tengo el cambio de pañales y ya aprovecharé para salir a trotar un rato, y ojala se convierta en rutina, porque en poco tiempo Sara cambiará de horarios..... y quizás su padre vuelva a ser un holgazán que se lía con las sábanas.
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